viernes, 11 de julio de 2008

DE CAMINO AL TRABAJO EN METRO

Un día cualquiera.
Suena el despertador a las 6
Te levantas sin ser consciente de si estás o no despierto.
Te mojas, más que te lavas.
Semiinconsciente pones la leche en el microondas
Tomas ese desayuno obligado que alimenta pero no gusta
Te peinas, coges la ropa de abrigo
Caminas en el barrio gris aún adormilado
Entras en la cueva del metro
Rostros anónimos sin nada que decir
Entras en el vagon con la prisa automática
Te sientas en uno libre
El tedio lo puede todo
Un día más, todo igual

¿TODO? ¡Vaya! no siempre es gris un día de metro



Sinceramente vuestra. SELENIA

No hay comentarios: